Vestí tu sillón

Si sentís que tenés la zona del sillón muy pelada, este tip te va a venir bárbaro.

¿A qué me refiero con "vestirlo"?

A agregarle cosas - deco útil - para darle más personalidad.

Y no hablo de los silloncitos laterales, la mesa ratona, la alfombra y toda la deco grande que acompaña a la zona del living. Eso ya forma parte del mobiliario.

Acá te voy a tirar algunas ideas con las que vas a ver cómo agregándole pequeñas cositas al sillón podes hacer que un espacio que se veía medio colgado se vuelva protagonista.

+ Usá una funda

Es ideal si te aburriste de ver siempre el mismo color.

Existen muchísimas telas y colores para hacerla - mi favorita es el tussor, pero tenés para todos los gustos -.

Una funda puede revivir un sillón viejo o hacer más versátil uno en buen estado; además de servirte como protección si tenés chicos o animales en casa.

Permite que juegues con colores vibrantes – tener un sillón de color contrastando con una pared blanca le suma mucha onda al espacio - sin obligarte a casarte con esos tonos.

Si te aburrís, ¡la sacás y listo!

+ Combiná almohadones

Si querés ir por una opción más simple y económica, pero igual de versátil, inclinate por los almohadones.

Un sillón no es sillón si no tiene un remolino de almohadones dando vueltas por encima ¿o no?

Jugá con las texturas y colores para darle más personalidad.

¡TIP!: Si tu sillón es de color neutral - blanco,negro o gris -, tirarte a jugar con colores bien llamativos, para combinar buscá tonos complementarios.

Ahora, si tu sillón ya es de algún color llamativo, combiná almohadones con frases, de colores neutros y con distintas texturas - buscá telas copadas que se diferencien unas de las otras -.

+ Mantas

Ponerle una manta en uno de sus laterales es un toque deco divino.

Ya sea nórdica o cualquier tipo de lana/tela, usar un elemento que corte con la textura del sillón -y además sirva para días de frío - va a vestir mucho más el espacio. + Mesa de arrime

Ponerle una mesa de arrime a tu sillón no solo va a vestirlo y seguirle sumando texturas, sino que también va a servirte de apoyo. Podés dejarla en un lateral cuando no esté en uso.

Hoy en día existen un montón de modelos, tenés desde las que son con pie hasta las de encastre. Pará saber que color y forma elegir, guiate siempre por los otros materiales que intervienen en el espacio.

+ Lámpara de pie

Le vas a sumar luz y va a servir como un complemento más para el living.

A veces los rincones muertos entre sillón y pared son inevitables.

Poniéndole una lámpara de pie, o porque no colgante, vas a rellenar ese espacio, sumar luminosidad y jugar todavía más con el diseño del ambiente.

+ Cuadros/espejos/estantes

Ahora sí, saltamos a la pared.

No podemos dejar la parte de arriba pelada ¿no?

Sumale cuadros o espejos para llamar más la atención.

Si elegís cuadros, anímate a jugar con composiciones de tamaños y colores.